Considero que las pruebas no son suficientes para respaldar una sanción en esta situación, debido a que no existe evidencia que demuestre quién estaba en ese lugar con anterioridad, además de que el gospel podía haberse movido sin mayor complicación a otro sitio, como también pudo hacerlo la party.
El tema es que no es posible considerar una sanción sin conocer realmente qué sucedió y las pruebas actuales no demuestran nada más que dos grupos discutiendo por un sitio y una conducta que no se volvió a repetir.