"Me siento bien, pero, hay veces, mis compañeros, mucho me molestan, al decirme que, en vez de ser chilena, parezco que soy peruana, por el color de mi piel y me discriminan, a veces. Un poco, por el color de mi piel. Me dicen que soy muy negra, pero, al compararme con ellos, soy el mismo color que ellos, que, en vez de parecer chilena, parezco blanca, por la piel, que soy más morena y los chilenos son blancos. En verdad me siento bien, porque siempre me dicen lo mismo y ya estoy acostumbrada a lo que me dicen. No está bien, no, porque en muchos casos, yo le he dicho a la directora, pero lo suspenden, pero es lo único que hacen, pero no le llaman a los padres de los niños que me molestan, pero, los que molestan son los hombres”
(Xiomara, 10 años, Independencia, mamá y papá peruanos)
Dejemos de normalizar la violencia, el racismo, el etnocentrismo y el adultocentrismo como procesos de socialización.